Improvisa y triunfaras

Siempre me he sentido atraída por entender los procesos relacionados con el trabajo en equipo, la cooperación y las situaciones o los juegos "ganar –ganar", en contrario a los juegos "ganar – perder". No podemos negar que estamos acostumbrados a entender situaciones dadas como juegos de "suma cero". En estos juegos, la suma total es siempre cero. Si uno gana, indefectiblemente el otro pierde. Siempre se trata de ganar o perder.

Pero, me interesa como se desarrollan y actúan los procesos "ganar-  ganar", cuál es su base y cuál su función desde una perspectiva evolutiva, a diferencia de la competencia del juego "ganar- perder" y de la actitud tan poco cooperativa y tan competitiva que es nuestra moneda diaria desde la Revolución Industrial.

Cada día hay más y más pruebas de la importancia de otros tipos de inteligencias, fuera de la capacidad intelectual, del coeficiente intelectual (IQ) y de los procesos cognitivos de pensamiento.

Desde mi punto de vista, la conciencia y el desarrollo de otros tipos de inteligencia contribuirá al desarrollo de procesos creativos, mejorara considerablemente las relaciones interpersonales y contribuirá al éxito personal y social de muchas formas. Comenzando desde la afectividad positiva,  pasando por el aumento de la motivación y llegando a la mejora de los procesos de toma de decisiones. Quizá la base del proceso "ganar - ganar" también se encuentre en el desarrollo y en el uso de la multiplicidad de inteligencias, y no necesariamente en el entendimiento intelectual de las conveniencias. Puede ser que el hincapié puesto en la conveniencia y la racionalidad, partiendo siempre del punto racional de "ganar o perder" frena el proceso cooperativo. En los últimos años, cada vez más, oímos sobre el "ganar-ganar" y sus beneficios. Quizá estemos siendo testigos de un notable desarrollo evolutivo en nuestras capacidades mentales.

He aquí dos ejemplos de inteligencias que no se registran ni se miden en los test de medición del  IQ:

- Inteligencia práctica: la capacidad para resolver problemas diarios, la capacidad de identificar formas eficaces de hacer algo, simplemente "saberlo", una especie de "conocimiento tácito"."

- Inteligencia Emocional: evaluación y expresión de los sentimientos, capacidad de entender y expresar las emociones propias, capacidad de identificar y entender  las emociones ajenas,  percibir y entender los sentimientos de los otros, capacidad de regulación de las emociones propias. Reconocimiento y utilización de las emociones como medio facilitador del liderazgo.

En mi opinión, otras habilidades importantes podrían incluirse en el término "Inteligencias Múltiples". Habilidades entrenables. Estas serian: la imaginación, la capacidad de visualizar algo que no existe –todavía- en la realidad,  la intuición, esa clase de conocimiento no lógico / racional y la espontaneidad. Definiré el término espontaneidad distinguiéndolo de la impulsividad. La impulsividad lleva a una respuesta rápida, pero que muchas veces no se adapta a la ocasión de la mejor manera, no viene desde la retrospectiva y de la responsabilidad,  por lo tanto a veces lastima a otras personas y a uno mismo. Cuantas veces la impulsividad lleva al arrepentimiento de lo dicho o de lo hecho? Por el contrario, la reacción espontánea es una reacción adaptada, actuando como una variable contextual, asumiendo así la persona la responsabilidad del acto en cada momento.

En mi opinión y experiencia, el entrenamiento de las "inteligencias múltiples", de la inteligencia  práctica y emocional, de la intuición, la espontaneidad y la imaginación contribuye al individuo tanto como al entorno que lo rodea, desde el entorno más cercano hasta el más lejano. El entrenamiento y desarrollo de las "inteligencias  múltiples" llevan a un aumento de la flexibilidad, aumento de la agilidad mental, aumento de la capacidad de innovación, a una mayor capacidad de adaptación a los cambios y de liderar cambios, así como también contribuye al aumento de la capacidad de cooperación y de participación.

Estoy convencida de que nuestra sociedad está viviendo una creciente necesidad de cooperación y de capacidad participativa como base para el desarrollo. Estamos necesitando una conciencia más profunda de las relaciones, de las interacciones e influencia mutua entre todos las partes que constituyen nuestra sociedad. Estamos queriendo un mundo donde el proceso creativo y el diálogo interdisciplinario fluyan en su base.

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A mi entender, las técnicas de entrenamiento mental que implica la improvisación son una gran herramienta para desarrollar las habilidades y capacidades citadas. El entrenamiento incluye un estudio introspectivo de los motivos, las percepciones, las creencias y los patrones de pensamiento. La técnica habitúa al hombre a romper los patrones y desafiar las creencias y suposiciones. La improvisación coloca a la persona en un lugar creativo, atenta al entorno cambiante del medio ambiente, en una escucha profunda, abierta a la experiencia, a la imaginación, lista para liderar y adaptarse activamente a los cambios. Desarrollando así las capacidades de responder espontáneamente y de manera responsable. Poniéndose activamente en un lugar cooperativo de participación expansiva y creadora de nuevas realidades.